Nunca juzgues las desiciones
ni la vida de los demás,
nadie, y menos tú, eres perfecto,
todos somos pecadores pero
cada cuál peca a su manera
y por ese motivo no tienes ningún
derecho a criticar lo que cada
uno hagaconsu vida.
Venimos al mundo a disfrutar
lo más y mejor que podamos
y si en el camino fallamos,
tenemos la oportunidad de
aprender de nuestros errores
para no volverlos a cometer.
Eso te incluye a ti porque
también tendrás tus tropiezos
y quizás sean peores que los
de las personas a las que señalas
con el dedo así que, a vivir
que la vida son dos días.
