Notables diferencias entre la gente exitosa y la gente fracasada.
La gente que siempre está aprendiendo, adquiriendo conocimientos, queriendo saber más y no piensa que tiene la razón absoluta en todo, es de lo más exitosa.
Desear el bien a los demás ya no solo es ser exitoso, es ser una gran persona y con mucha empatía hacía los demás.
Es de bien nacido, ser agradecido, la vida da muchas vueltas y nunca sabemos a quien podemos necesitar. Ser amable y agradecer no cuesta nada.
Trabajo en equipo, aún siendo el líder y compartir el éxito con tus compañeros, ya dice todo sobre este tipo de gente. No necesitan medallas para sentirse más importantes que los demás.
Y aún teniendo mil dudas, en determinados momentos, si realmente sabes lo que quieres y luchas por ello, la recompensa será maravillosa.
Los cambios en nuestra vida son muy necesarios, nos enseñan y crecemos como personas al tener experiencias nuevas y disfrutar de ellas. Quizás este cambio no vaya tan bien como esperabas pero aprender, aprendes lo que ya no quieres o no volverías a hacer.
A veces, cuesta mucho perdonar, eso depende del daño que te hayan causado pero, perdonándote primero a ti mismo y al causante de ese mal, tu mente, alma y corazón, podrán seguir con tu vida en paz. Hazlo por ti, para seguir avanzando. El rencor te estanca y no avanzas.
Compartir con los demás, algo que pueda ayudarle o hacerle bien es algo que poca gente hace, prefieren guardar esa información solo para su beneficio pero, es bueno dar un empuje a alguien que realmente lo necesite, mañana puedes necesitarlo tú y alguien hará lo mismo por ti.
Vivir el hoy, el presente, ese minuto que está pasando porque si te empeñas en estancarte en el pasado, nada bueno puede aportar a tu vida, es como mirar la misma película una y mil veces, recuerda, hay más estrenos que seguro te van a encantar.
Te trazas esas metas y luchas por ellas, son tus sueños, esa ilusión que te empuja a seguir y conseguir lo que verdaderamente quieres, eso que seguramente te hará muy feliz. Si no se consigue, pues se trazan más.
Hay muchos puntos de vista con respecto a cualquier situación, no te quedas con la que piensas es la real porque tú crees ciegamente en ella, buscas, comparas, analizas y seguro que te sorprenderá otra manera diferente de ver las cosas.
No siempre se puede ser feliz, es imposible pero si eres de esas personas positivas, que sonríen y ven el lado bueno de las cosas, no dejes de iluminar esa parte de ti y contagiar a los demás con ello.
Si cometes errores, acéptalo, reconócelo, no pasa nada, nadie es perfecto, todos lo hacemos pero solo es de gente sabía y con sentido común, el echo de hacerse responsable de ellos. No cuesta nada y las personas no se sentirán mal porque quizás piensen que ellos son los culpables de lo que tú y solo tú haces mal. No eches cargas a los demás que no le pertenecen, eso solo lo hacen los cobardes.