Aléjate de las personas que te amarguen la vida, aunque sean de tu familia. En la familia existen tóxicos que te pueden hacer la vida imposible.
Toda persona que perturbe tu paz mental, te haga sentir mal, absorba tu buena vibra, esté siempre en conflicto contigo o el mundo entero, no aporte paz ni felicidad a tu vida, aléjala de ti. Son personas egoístas, inmaduras, narcisistas y se pasan la mayoría de su tiempo quejándose por todo. También suelen ser personas que todo lo critican, a todo le ponen un pero, no salen de ese bucle tan tóxico y lo peor es que lo proyectan en quienes le rodean llegando, incluso a desestabilizar a quienes están a su alrededor. Ya sea familia, amistad o relación de pareja, lo mejor es no entrar al trapo en sus provocaciones y si puedes, alejarte para siempre de ellas. Sé egoísta y mira por tu propia felicidad.