-A qué hora te viene bien
que vaya a tu casa?
-A la que quieras, no
te voy a abrir.
Venir puedes venir pero,
que te invite a entrar ya
es otro tema. Hay gente
que se toma la molestia en
preguntar para visitarte pero
lo que no es nada compresible
y está totalmente fuera de lugar
es presentarse sin avisar.
Somos muchas las personas
Somos muchas las personas
a las que no nos gusta nada de nada
esas visitas sorpresas que te dejan
totalmente descolocados y te
suelen provocar un cabr3o monumental.
Es una falta de respeto hacía
la intimidad de los otros ¿acaso la
parte visitadora se ha llegado a
preguntar si esa persona tenía
planes para salir y por causa de
su mala educación tendrá que posponerlos,
porque aparecen de la nada sin previo aviso?
Siempre, siempre, hay que llamar
por teléfono antes de sorprender,
no gratamente a los demás, nadie tiene
porque dejar de hacer o no hacer
lo que tenía planeado ese día
por las malas cabezas.
Ya después estamos los que no abrimos
la puerta ni de coñ4. Suena el timbre y
de repente, silencio total en la casa.
Nadie tiene que saber que estamos,
no hay que dar pistas, no movemos
ni un pie, casi ni respiramos, no gesticulamos,
no damos señales de vida en nuestro
planeta y tan solo esperamos con paciencia
que desistan en el empeño de querer
entrar. ¡Ah no! que no, a dar la vara
a tu casa o si tienen suerte,
encontrar otra víctima para
las visitas no deseadas e inesperadas.
😁😁😁😁😁😁
-¿Miedo a estar sola?
Miedo es cruzar una calle empedrada en tacones.
😆😆😆😆😆
-Cómo te entiendo.
-Pero aquí sigues.
Que no lo pillan, pesadez de
gente, ¿ no saben lo que son
las indirectas bastante directas?
Que te pires, lárgate, fuera,
chao, bye, hasta lueguito...
¿Así o te echo a empujon3s?
😒😒😒😒😒
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